1.- Por su presentación de antecedentes, un particular recurrió a esta Superintendencia reclamando porque la C.C.A.F. a contar del año 2014 habría dejado de pagarle las asignaciones familiares que le corresponderían por su hija.

2.- Requerida al respecto, la C.C.A.F.informó que el recurrente se encuentra afiliado en esa Corporación desde el 12 de agosto de 2013, a través de la empresa, con su cónyuge como causante de asignación familiar vigente a la fecha del informe.
Agrega, en relación a la hija, que su reconocimiento como causante de asignación familiar se extinguió el día 30 de abril de 2014, por haber alcanzado la mayoría de edad.
En su correo electrónico posterior, esa Caja complementó la información entregada señalando:
- Para el año 2014, de enero a abril se pagaron las asignaciones familiares por las dos causantes, extinguiéndose el reconocimiento de la hija por no presentar certificado de alumno regular. Luego, en junio de ese año, el recurrente regularizó la situación, por lo que se le pagó las asignaciones familiares hasta septiembre, ya que no presentó el certificado de estudios de su hija por el segundo semestre.
- Para el año 2015, se pagó sólo la asignación familiar por la cónyuge, ya que durante el primer semestre no se presentó certificado de estudios de la hija. Por el segundo semestre, recibió el beneficio por ambas causantes al haber acreditado estudios de la hija.
- Para el año 2016, la Caja autorizó ambas cargas, pero la empresa empleadora sólo compensó el valor de las asignaciones familiares por la cónyuge, correspondiéndole a esta última regularizar esta situación. A contar de octubre de ese año la empresa compensó pagos por ambas causantes.
- Para el año 2017, sólo se autorizó el pago por la cónyuge, debido a que no se presentó los certificados de estudios de ambos semestres.

3.- Sobre el particular, esta Superintendencia revisó el sistema de información que administra (SIAGF), constatando que el recurrente es beneficiario de asignación familiar por su cónyuge, desde el 12 de agosto de 2013 en forma continuada hasta la fecha. Por otra parte, el referido Sistema también registra que fue beneficiario por su hija, en forma discontinua, desde el 12 de agosto de 2013 hasta 30 de abril de 2017.
Asimismo, se verificó en el sistema de información y verificación del gasto mensual (SIVEGAM) que también administra este Servicio, que efectivamente la C.C.A.F. ha informado el pago de asignaciones familiares por la cónyuge en forma continuada desde el 12 de agosto de 2013 hasta la fecha, del mismo modo, con respecto a la hija del recurrente, se informó el pago de asignaciones familiares, en forma discontinua, desde el 12 de agosto de 2013 hasta diciembre de 2016. Cabe señalar que en el SIVEGAM, para el año 2016, no se informó la compensación del gasto por asignaciones familiares pagadas al beneficiario por su hija en el período que discurre desde el 1° de mayo al 30 de septiembre, lo que resulta concordante con lo informado por la C.C.A.F., en relación a que el empleador no compensó dicho período.
Al respecto, este Organismo debe manifestar que conforme a la letra b) del artículo 3° del D.F.L. N° 150, de 1981, del Ministerio del Trabajo y Previsión Social, son causantes de asignación familiar los hijos y los adoptados hasta los 18 años y los mayores de esa edad y hasta 24 años, solteros, que sigan cursos regulares en la enseñanza media, normal, técnica, especializada o superior, en instituciones del Estado o reconocidas por éste, en las condiciones que determine el reglamento.
De la norma antes citada se infiere que el supuesto básico para que los hijos mayores de 18 y hasta 24 años de edad puedan ser invocados como causantes de asignación familiar, es que sigan cursos regulares en establecimientos educacionales del Estado o bien que se encuentren reconocidos por éste.
Ahora bien, conforme al inciso segundo del artículo 25 del D.S. N° 75, de 1974, del Ministerio del Trabajo y Previsión Social, el hecho que el causante siga cursos regulares en la enseñanza media, normal, técnica, especializada o superior, deberá acreditarse con un certificado expedido por la autoridad competente del respectivo establecimiento educacional.
A su vez, la Circular Nº 2.511, citada en Concordancias, preceptúa en el punto 3.2.2.4 referido a la acreditación de requisitos para la obtención del reconocimiento del causante, que la calidad de estudiante de un "curso regular" debe acreditarse mediante un certificado de alumno regular emitido por la autoridad competente del respectivo establecimiento educacional. En dicha Circular se indica que la Contraloría General de la República ha señalado que se entiende por "cursos regulares" aquellos a través de los cuales en los períodos que se fijan en los respectivos planes de enseñanza, se obtienen los conocimientos necesarios para optar a un título o diploma que se otorga como una culminación de tales estudios.
Adicionalmente se debe considerar, que conforme al inciso segundo del artículo 18 del D.S N° 75 citado, el pago de la asignación familiar se hace hasta el último día del mes en que el causante mantenga su calidad de tal.
Al respecto, cabe señalar que mediante la citada Circular N° 2.511 de esta Superintendencia, se ha instruido en el Punto 3.2.4. en su párrafo 3°, que las resoluciones por medio de las cuales se reconocen a los causantes menores de 18 años de edad deberán indicar como fecha de término del reconocimiento el 31 de diciembre del año en que cumplen dicha edad. Si continúan estudiando en el período escolar siguiente, las resoluciones deberán dictarse cuando se acredite la calidad de alumno regular del causante, pero tendrán vigencia a contar del 1° de enero del año respectivo, si se acreditó la calidad de alumno regular para el primer semestre del año, de lo contrario si no se acreditan estudios en el primer semestre del año pero sí en el segundo semestre o en otro año, el reconocimiento se hará a partir del 1° del mes de inicio del período escolar que se haya acreditado.
Cabe también hacer presente que dicha Circular, dispone en el numeral 3.3.2.1. que los beneficiarios de los causantes mayores de 18 años de edad que se encuentren cursando estudios en la enseñanza media, normal, técnica especializada o superior, deben acreditar tal circunstancia mediante la presentación del correspondiente certificado de alumno regular, anual o semestral, según corresponda. Dado que hay diferentes fechas de inicio de los estudios, para efectos de ordenamiento, dicha Circular establece los plazos que se indican a continuación, para que las entidades que participan en la administración del Sistema verifiquen la acreditación de las matrículas:
a) Régimen anual: acreditación hasta el 30 de abril.
b) Régimen semestral: acreditación primer semestre, hasta el 30 de abril, acreditación segundo semestre hasta el 30 de septiembre.
Por su parte, el Reglamento sobre Prestaciones Familiares, D.S. N°75, de 1974, del Ministerio del Trabajo y Previsión Social, establece en el inciso tercero del artículo 18, que las asignaciones familiares correspondientes a causantes estudiantes mayores de 18 años de edad, deben continuar pagándose sin solución de continuidad durante los meses siguientes al término del período escolar y hasta aquél en que empiece el período siguiente, mes este último en que debe acreditarse la nueva matrícula. A este respecto, según lo señalado en el punto 4.2.4. de la Circular N° 2.511, sólo si la nueva matrícula no se acredita dentro del mes en que se inicia el nuevo período de estudio, debe suspenderse de inmediato el pago del beneficio de que se trata y se debe entender que el causante ha perdido su calidad de tal a contar del día primero del mes siguiente a aquel en que terminó el anterior período de estudio y que el beneficio se extinguió a partir de esa fecha, debiendo, por ende, el beneficiario devolver las asignaciones familiares indebidamente percibidas desde entonces. Similar procedimiento debe aplicarse al término de un semestre en aquellos casos en que el régimen de estudios es semestral.
En la especie, consta del certificado de nacimiento que se ha tenido a la vista, que la hija del recurrente cumplió los 18 años de edad el 29 de octubre de 2013, de modo tal que la Caja de Compensación debió mantener vigente el reconocimiento hasta el 31 de diciembre de 2013, por aplicación del inciso final del artículo 11 del D.F.L. N° 150, que dispone que la asignación familiar causada por los hijos se paga hasta el 31 de diciembre del año en que se cumplan los 18 ó 24 años de edad, según corresponda.
En consecuencia, esta Superintendencia debe manifestarle que aprueba lo informado por la C.C.A.F., en cuanto a requerir al recurrente la presentación de certificados de estudios regulares, en los términos antes señalados, para cada uno de los semestres que su hija haya cursado en el período. Sin embargo, el recurrente podrá solicitar el reconocimiento y pago retroactivo por su hija en la medida que acredite que en cada semestre cumplió con los requisitos para ser causante de asignación familiar.
Asimismo, dado que la Caja informó que con posterioridad al 30 de abril de 2014, se acreditaron estudios regulares de la hija del recurrente para el primer semestre de 2014, si no se acompañó certificado de estudios para el segundo semestre del citado año antes del 30 de septiembre de 2014, se debe retrotraer el reconocimiento de la causante al último día en que se acreditaron estudios por el primer semestre.
Además, revisado el sistema de información que esta Superintendencia administra (SIAGF), se ha verificado que aparte del reconocimiento de la hija del recurrente, aparentemente se registra el reconocimiento de otra causante con reconocimiento vigente desde el 12 de agosto de 2013 hasta el 30 de abril de 2014 en calidad de hija estudiante. Atendida la numeración del RUN, la similitud de éste y el hecho que se verificó que ambas causantes tienen el mismo nombre y apellidos, es dable presumir que se trata de un error en el ingreso del reconocimiento de la hija del causante, por lo cual procede que la Caja rectifique los referidos registros anulando los ingresos erróneos y efectuando los que correspondan en conformidad a las directrices de este Oficio.
De lo obrado deberá dar cuenta directamente al interesado con copia informativa a este Servicio.
En relación, al período de mayo a septiembre de 2016 en que las asignaciones familiares autorizadas por la Caja por la hija del recurrente no fueron compensadas por la empresa empleadora, corresponde al recurrente requerir de dicha empresa que regularice la situación.
Finalmente esta Superintendencia cumple con manifestar que lamenta la demora producida en la emisión del presente oficio, lo que no debería volver a repetirse, debido a las medidas implementadas tendientes a mejorar los tiempos de respuesta.